
El objetivo de la práctica de yoga



El Yoga es una filosofía de vida que tiene como objetivo la autorealización del Ser, a través de la sanación de cuerpo y mente. La práctica de Ashtanga Vinyasa Yoga se basa en un escrito antiguo que se llama Yoga Sutra, de Patanjali. Fue escrito aproximadamente hace 2000 años y describe las 8 ramas (ashtau - 8 anga- miembros) para llegar al conocimiento de uno mismo, y así alcanzar la unión entre mente - cuerpo y espíritu.
Patanjali nos propone un camino hacia la paz, donde cesan las fluctuaciones o movimientos de la mente. Solo entonces podemos vernos en nuestra forma natural y real - a través del silencio.
El Yoga Sutra es un manual para la práctica de yoga, que nos ayuda a superar los obstáculos y resolver las limitaciones mentales hasta llegar al Moksha- la liberación de la esclavitud y el apego a la mente psicológica, la que nos hace sufrir. En el corazón de la filosofía del Yoga está Ahimsa - no violencia. No te hagas daño, no hagas daño y no dejes que te hagan daño. Este principio lo trabajamos y lo tenemos muy presente en nuestra práctica sobre la esterilla así como en nuestra vida fuera de ella.
La práctica física de Ashtanga se basa en Vinyasa (sistema de respiración y movimiento) que sincroniza la respiración rítmica con el movimiento y nos lleva de una postura a otra creando una secuencia fluida y energética de posturas (asanas). Junto a la respiración usamos bandas (cierres energéticos) y drishtis (mirada enfocada), conseguimos controlar nuestros sentidos, centrándonos en una sola cosa, entrando en una profunda conexión con nuestra fuente, nuestra presencia, nuestro ser. Es una meditación en movimiento. La práctica regular nos lleva a calmar nuestra mente y a sentirnos bien en nuestro cuerpo.
El trabajo físico nos pone en contacto directo con nuestro cuerpo a través de él junto con la respiración. El cuerpo vive aquí y ahora. Nuestra cabeza está muy lejos de nuestros pies y la mayor parte del tiempo vivimos en ella y nos olvidamos de la tierra, el cuerpo y el momento presente, lo que nos causa sufrimiento.
La práctica de Asana, junto con vinyasa produce calor interno que permite a las toxinas (físicas como mentales y emocionales) liberarse a través del sudor, lo que nos hace sentir más limpios y ligeros al acabarla. Como quitar capas de cebolla, o limpiar los lentes de las gafas para ver mejor. Este proceso nos ayuda a fortalecer el cuerpo y el sistema inmunológico, hacerlo más flexible igual que a la mente.
No hay una edad o condición específica para empezar la práctica. Siempre se pueden adaptar las posturas y los movimientos a las necesidades especificas del practicante. Solo hace falta la voluntad, las ganas de aprender y disfrutar.
Ashtanga Yoga según Sri K. Patthabi Jois


Sri K. Pattabhi Jois (1917-2009) fue el gran maestro de Ashtanga Vinyasa Yoga. El enseñaba en Mysore, una ciudad en el sur de la India, las secuencias Ashtanga como las aprendió de su maestro Sri T. Krishnamacharya, (el padre del Yoga moderno y de la mayor parte de las practicas de yoga que conocemos hoy en día) y como los sigio desarrollando toda su vida.
Al final de los años 60 y a lo largo de los 70 del siglo pasado empezaron a llegar a Mysore los primeros americanos como David Williams, Nancy Gilgoff, luego David Swenson, Richard Freeman, Tim Miler, Danny Paradise, Tomas Zorzo y mas (lo siento por los que no nombro) que hoy en día forman unos de los mas influyentes maestros de Ashtanga.
El sistema de Ashtanga Vinyasa se compone de tres secuencias: La Primera Series (Yoga Chikitsa = Yoga Terápia), que purifica y alinea el cuerpo y refuerza nuestro sistema inmunológico. La serie intermedia (Nadi Shodhana), que purifica el sistema nervioso a través de la apertura y limpieza de los canales energéticos y, la Serie Avanzada (Sthira Bhaga) A,B,C y D, que integra la fuerza y la tolerancia de la práctica, requiriendo niveles más altos de flexibilidad y humildad.
El orden de las posturas y series se aprenden en una forma gradual y progresiva cada practicante a su ritmo, capacidad, interés, etc. Cada postura nos prepara para la siguiente. Así desarrollamos la fuerza, la flexibilidad y el equilibrio para seguir adelante, siempre sincronizando los movimientos con nuestra respiración.
Durante la práctica creamos calor en el cuerpo que ayudará a purificar los músculos y órganos, expulsando toxinas y generando hormonas y minerales beneficiosos. El resultado es un cuerpo fuerte y ligero.
Normalmente no pensamos en fuerza, aguante y sudor cuando pensamos en una práctica de yoga, no obstante el Ashtanga Yoga es un sistema exigente, que hace fluir la energía vital (prana) a través de todo el cuerpo. Esto ayudará que nuestro cuerpo se sane y que nuestra mente sea clara, lúcida y precisa.
